domingo, 28 de marzo de 2010

viernes, 26 de marzo de 2010

Steve Hanks

Steve Hanks, pintor nacido en 1949 en San Francisco, es considerado actualmente como uno de los diez mejores artistas norteamericanos.

Inicialmente, sus obras fueron dibujos a lápiz y óleos pero una reacción alérgica estos le obligó a experimentar con acuarelas. El uso de las técnicas aprendidas de sus otros medios le llevó a crear acuarelas con el terminado de óleos.



martes, 23 de marzo de 2010

lunes, 22 de marzo de 2010

viernes, 19 de marzo de 2010

"Der Ursprung des Spanischen"

El Castellano,

           dialecto del catalán..!!!

     El estudio "Der Ursprung des Spanischen" realizado por el Romanistische Abteilung de la Universidad de Friburgo dice demostrar que el origen de la lengua castellana es el catalán.

     El grupo de lingüistas e historiadores alemanes descubrieron en la Biblioteca Vaticana una serie de textos de mediados del siglo IX dC. donde escribanos de la corte de Ramón IV discutían la fuerte influencia que estaba ejerciendo el catalán sobre el castellano "las gents de la castella usen ja nosos vocablas", "la gente de castilla ya usa nuestras palabras" se puede leer en el texto de uno de los escribanos. A mediados del siglo IX la influencia catalana sobre el resto de la península creció de forma muy notoria. La gran influencia económica y social que los catalanes ejercieron tuvo que dejar huella.
"La preponderancia de la cultura catalana, y su mayor grado de desarrollo supuso en las zonas de contacto y superposición un fenómeno de asimilación de los rasgos culturales" declaraba Mark Vlamynck, historiador del Romanistische Abteilung.

     Este estudio se terminó en enero del 2003, está siendo muy poco publicitado por las grandes presiones políticas que genera.

¡Distribúyanlo mediante la red!


Se puede encontrar documentación referente a dicho tema en:

     http://www. <http://www./> .jura.uni-freiburg.de/institute/rgesch1/
<http://jura.uni-freiburg.de/institute/rgesch1/>

     http://www.uni-freiburg.de/wiss-ges/
<http://www.uni-freiburg.de/wiss-ges/>

     http://bav.vatican.va/it/v_home_bav/home_bav.shtml
<http://bav.vatican.va/it/v_home_bav/home_bav.shtml>

     http://www.eset.com <http://www.eset.com/>

miércoles, 17 de marzo de 2010

domingo, 14 de marzo de 2010

Adeu neu, adeu,adeu

Crónica de cómo un pueblo del Baix Empordà pasó casi cinco días sin luz


La revancha del butano, la chimenea y la radio. Casi cinco días sin electricidad en un pequeño pueblo del Baix Empordà
    
En los inviernos crudos de un pueblo pequeño, la gente mayor de noche se recoge pronto. Es entonces cuando, al caer la oscuridad, se filtra por las ventanas la luz de la vida que discurre dentro, y el perfil del pueblo, visto desde lejos, centellea tachonado de luminarias en los alféizares.  

En Colomers, un municipio de 210 habitantes en el Baix Empordà, faltó la luz casi cinco días por el temporal de nieve, y esa estampa deliciosa se perdió –junto a la paciencia y la esperanza– durante cuatro noches. Había en su lugar una atmósfera espectral en las chorreantes callejas empinadas, lucecitas tenues en algunas fachadas, y veladas de otra época en estos tiempos modernos. Así estaban Josep Castelló y Matilda Ribas, un matrimonio de 76 años ambos, refugiados al amor de la lumbre en su casona de piedra. "Después de la cena, estamos un rato aquí delante del fuego, para que la cena baje un poquito, y luego a la cama. No se puede ver la televisión, no se puede hacer nada –suspira el señor Castelló, atizando las llamas del hogar–. Aquí somos gente mayor, que cultiva cuatro judías y cuatro tomates, con hijos de 40 años que se han ido del pueblo".

Benditas chimeneas. Qué buen servicio han prestado en estos días de frío y negrura a los pueblos dejados de la mano de las compañías eléctricas. En Colomers, el suministro se cortó el pasado lunes a las tres y media de la tarde. Y algunas noches la temperatura dentro de las casas era de seis grados, con calefacciones de gasóleo que no pueden funcionar sin electricidad. Hubo que recurrir al fuego salvador.

En casa de Joan Bonany, de 64 años, y Josepa Coll, de 58, el gran salón comedor de la planta baja se transformó entonces en dormitorio de campaña, con sofá cama y cuna de viaje, porque ahí está el calor de la chimenea, y es un bien demasiado precioso para no aprovecharlo cuando se tiene un nieto de 20 meses. El aludido, Aniol, corretea y trastabilla enfundado en un mono calentito.

Su madre, Elia, nuera de Joan y Josepa, vive con marido y bebé en el piso superior desde hace un año, a la espera de ver terminadas las dichosas obras de la casa que se compraron en la parte más alta de Colomers. "Están acabadas, y precisamente este fin de semana íbamos a mudarnos a la casa nueva, pero la nieve y la falta de luz lo han trastocado todo", cuenta Elia, recién llegada de Celrà, donde sí había suministro eléctrico. El jueves por la tarde realizó un desplazamiento relámpago en coche a casa de su hermano –que allí reside– para ducharse con maravillosa agua caliente, poner una lavadora y una secadora de ropa sucia acumulada y recargar el teléfono móvil.

Si alguien dudaba del valor insustituible de la familia como bálsamo protector ante la adversidad, convénzase de su error al constatar cómo las redes familiares se activaron para echar un cable a los parientes sitiados por la falta de energía eléctrica. "Nos vamos a dormir a Girona a casa de los abuelos, así nos duchamos, y cargamos el móvil y la Nintendo", relataba al volante de su coche una madre treintañera, Mercè Auguet, señalando a sus hijas pequeñas, Judit y Mar.

Mientras, y con la anochecida del jueves, la casa de los Bonany-Coll, padres de seis hijos, era un hervidero de gente laboriosa. Un hijo casado en Palafrugell ha traído un generador –la otra bendición durante estas jornadas de penuria– para que pueda arrancar al menos la calefacción de gasóleo. "Alguien se aprovecha –se duele el señor Bonany–. Un generador que el lunes valía 400 euros costaba luego 700".

También se ha acercado a ver cómo va todo una hija casada en l'Estartit, Marta, que es maestra de parvulario en Verges, adonde van al colegio en transporte escolar los pocos críos de Colomers. Pero sin luz no hubo clases allí en toda la semana… Y está Josep, el joven hijo soltero, encargado de controlar la cocción a la brasa del pollo que, acompañado de pan tostado con tomate, cenará esta noche toda la familia a la luz de velas y candiles.

Cómo cocinar los alimentos ha traído una de las venganzas históricas de estos días de comparaciones odiosas. El fuego del hogar alumbra, calienta y cuece las viandas, pero también la humilde cocina de gas butano se ha desquitado ante la moderna vitrocerámica; y la radio a pilas se ha tomado la revancha sobre esa televisión que se creía omnipotente. Al anochecer, entrañables transistores regalaban información y música a las casas a oscuras.

La cooperación vecinal ha brotado de igual forma. "Ha venido gente a traerme carne para que se la guarde en el congelador, entre vecinos tenemos que ayudarnos", explica Carme Massot, una viuda de 69 años que pudo mantener su congelador alimentándolo periódicamente gracias al generador que le dejó su hermano de Sant Jordi Desvalls. Lo ponía a ratos, para no molestar con el bronco ruido del motor a las casas de al lado, y porque lo fue prestando asimismo a otras familias para que aliviaran sus urgencias energéticas. También ha faltado el teléfono en algunos hogares, porque debido a la nevada un camión se llevó por delante en la carretera unos cables decisivos.

El propio alcalde, Josep Manuel López Gifreu, tuvo que ir a ducharse en plena noche a casa de unos conocidos, llevando en una bolsa toalla, chanclas, jabón, champú y útiles de afeitar. López Gifreu, de 50 años, alcalde de Colomers por Iniciativa per Catalunya desde 1995, estaba de veras indignado por el trato que este pequeño pueblo ha recibido. El suministro eléctrico no volvió hasta el viernes a las cuatro de la tarde, pero un 20% de los abonados de Colomers no tuvo luz hasta las nueve de esa noche, debido a una última avería interna.

"Endesa dio un teléfono a los ayuntamientos para que llamáramos para pedir información, pero las personas que te atendían te daban largas –protesta el alcalde–. Entiendo que se dé prioridad a poblaciones más grandes, con más habitantes, pero yo sólo pedía saber cuándo se arreglaría, porque la gente necesita saber eso para organizarse, comprar leña, comida, y tomar decisiones. Al final, tienes la sensación de que tu Govern no gobierna".

Asienten al oírle otros dos hombres del pueblo, reunidos en improvisado conciliábulo nocturno ante los faros encendidos de un coche, sintiéndose ninguneados por sus gobernantes. De vez en cuando aparece algún vecino linterna en mano, caminando a trompicones por la vía pública.

Si bien en tantas horas de incomodidad ha habido colaboración entre vecinos, es verdad que no ha faltado la maledicencia. La nevada del lunes pilló en Girona al alcalde, quien, no pudiendo regresar a Colomers, se quedó a dormir allí en casa de sus suegros. Alguien hace ahora correr la voz de que "se quedó en un hotel de cinco estrellas". El liderazgo de proximidad tiene esas servidumbres, y sin electricidad alguna gente –poca, a decir verdad– se ha puesto muy nerviosa.

Ha habido también grave quebranto para la actividad económica del pueblo. Las compras grandes se hicieron como siempre en coche, yendo a pueblos con luz, pues en Colomers no hay tienda de alimentación. Sólo la panadería de Can Llenç –es Llenç el nombre del santo patrón del pueblo– logró seguir activa, gracias a un generador que permitía hacer funcionar la máquina de amasar, y gracias a que los panes se cocían en horno de leña. "De todos modos, no he hecho tanto pan como de costumbre, y tampoco coca, sólo justo la que me han encargado. No hay que pedirle demasiado al generador", razona el panadero Lluís Pons, de 58 años.

El viernes por la mañana, la clientela guardaba cola, muy feliz, para llevarse barras y hogazas recién horneadas. "Al menos el pan no nos ha faltado", se decían unos a otros para consolarse.

En cambio, los dos restaurantes del lugar, El Cargolet y El Xalet, estuvieron cerrados durante toda la crisis, al igual que la peluquería. "Sin luz no se puede calentar el agua para lavar la cabeza a los clientes, no se puede usar el secador, no se ve bien para cortar el pelo", recita la peluquera, Mercè Freixas, de 46 años.

Mientras, la joven pareja formada por Roger Estrany y Clara Ramos, que lleva el restaurante El Xalet, se preparaba el viernes para fotografiar el contenido del congelador, una documentación esencial para cobrar el seguro. "Hay ahí dos mil euros en carne, pescado, pan, guisos… que están estropeados o a punto de estropearse", se lamenta Clara, temiendo por las reservas del fin de semana. Es tiempo de grupos que se juntan para comer calçots.

Colomers –que conserva una iglesia y una capilla románicas de los siglos X y XI– se halla a 80 kilómetros de Perpiñán, a 20 minutos en coche de la montaña o de la costa, y el cercano río Ter empieza a ofrecerle oportunidades de desarrollo económico, con kayaks y globos aerostáticos. Hace apenas un año, un matrimonio del pueblo puso en marcha un agroturismo, Can Fusteret. "Nos va bien, pero hemos tenido que cerrar cinco días, y esperamos poder atender a las dos familias de Barcelona que tenían reserva para venir este fin de semana", contaba el viernes la titular, Rosa Torramilans, algo más aliviada.

Bastante más ha penado Narcís Solés, propietario de una granja de engorde de patos en la que elabora foie y patés que sirve a restaurantes de Catalunya. La noche del jueves estaba muy angustiado. "Sin luz no podemos matar a los patos que ya están maduros y a punto; se morirán y perderemos el producto", explicaba. Los patos son degollados a mano, pero se despluman con maquinaria eléctrica. "Hemos ido matando y desplumando patos a mano, que es muy cansado, y metiéndolos a trozos en las cámaras frigoríficas –cuenta Narcís–. Las abrimos poco para que aguanten".

La luz volvió a esa granja el viernes por la noche, pero Narcís, sintiéndose desamparado como muchos en Colomers, ya ha tomado su decisión: comprará un generador bien potente, para que algo así no le vuelva a pasar.

El petit rottweiler

sábado, 13 de marzo de 2010

viernes, 12 de marzo de 2010


Colorín, colorado, la décima se ha acabado

Home: Déu?
Déu: Si?
Home: Puc preguntar alguna cosa?
Déu: Per descomptat!
Home: Què és per tu un milió d'anys?
Déu: Un segon
Home: I un milió d'euros?
Déu: Un cèntim
Home: Déu .... podries donar-me un cèntim?
Déu: Espera un segon

miércoles, 10 de marzo de 2010



En Sevilla tenía que ser.

En ninguna otra ciudad, ni en ningún otro lugar, como en este barrio sevillano, se puede decir de manera más gráfica, seria y con arte lo que sesudos analistas económicos tratan de hacer todos los días. Me explico:
En algunos establecimientos de Triana (bares, talleres, etc.), al entrar, nos encontramos con un cartel que dice:

PROHIBIDO HABLAR DE LA COSA”.

Si te diriges al propietario y le preguntas por el sentido del mismo, te explica que está harto del pesimismo que todo el que entra en su establecimiento trae con él; “la cosa está fatal”, “hay que ver como está la cosa”, “la cosa va cada día peor”, “...ojú, como está la cosa”. 

Nevada a Castello

Dia 8 i dia 9



Nevada a la Jonquera

Fotos del dia 8 i del dia 9 fetes per la Sandra a la Jonquera





lunes, 8 de marzo de 2010

viernes, 5 de marzo de 2010

Pot ser l'aeroport mes perillos del mon. Lo que esta segur es que es la platje menys tranquil.la de l'illa de St Maarten

jueves, 4 de marzo de 2010

Fotografías que no están ráncias








Fantásticas fotografías tomadas hace 68 años. Probablemente, tendrás que ir a un museo para ver el aspecto de una cámara Brownie. Las Fotos de Pearl Harbor almacenadas en una vieja cámara Brownie de un marinero que estaba en el USS QUAPAW ATF-11O, encontrada recientemente en un armario, han sido reveladas.